Gibby abre un restaurante secreto en el sótano de la escuela, al que llama «Gibby’s». Luego, se asocia con Sam para que sea su guardaespaldas y le ayude en el restaurante, ya que ella tiene la receta de un sandwich de carne (cuyo secreto es la carne) el cual se convierte en un éxito con los clientes (entre ellos, el mismísimo director Franklin).