Freddie decide mudarse cuando su mamá lo avergüenza en público, para demostrar que puede estar sin ella, pero su nueva habitación resulta ser un lugar en el sótano, junto al motor del elevador. Mientras tanto, Carly, Sam y Freddie empiezan un negocio de fotografía de animales, pero los «Mascógrafos» (fotógrafos de mascotas) se enojan porque su estudio era el único en Seattle que hacía ese trabajo y, como venganza, destruyen el estudio de iCarly, y Carly, Sam, Freddie y Spencer deciden vengarse, después su mamá se arrepiente y se disculpa con Freddie y él le dijo que si ella promete no avergonzarlo en público.